En los albores
de la pericia caligráfica, un método de
referencia en el campo de la gráfística era el llamado gramatomórfico, aun hoy en
día cuenta con numerosos partidarios. Sin embargo, en la actualidad realizar un
estudio perteneciente a la grafística, basándose única y exclusivamente en los
principios de la morfología de grafías de un manuscrito, sería considerado como
un grave error.
También se
sacaron en liza otros métodos como la grafométrica, insensible al componente
dinámico de la escritura del ser humano, dejándose influir por condiciones
exógenas o endógenas. Por tanto, se concluye que se trata de un aspecto
incompatible por su aplicación matemática, pues no evalúa procesos sino
productos estáticos.
Aún así, el
análisis de la morfología de letras es sin duda un complemento valioso, pero en
ningún caso puede llevar el peso de un dictamen, no podemos obviar que la
morfología de la escritura es lo más llamativo y por tanto lo que se va a
intentar imitar.
Un conjunto de
trazos puede denotar infinidad de características referentes a la morfología,
gestos – tipo, que asimilados se realizan de forma inconsciente u otro tipo de
rasgos que siendo igualmente personales pueden modificarse con el paso del
tiempo. Por tanto, conociendo esto, comprenderán que el motivo de basarse
únicamente en la forma aparente de las letras es un método falto de fiabilidad
y al mismo tiempo poco elaborado.
Totalmente de acuerdo.
ResponderEliminarDe ahí la utilización del método grafónomico que aúna ambos.
Efectivamente hay que contar con todo lo que se pueda
EliminarUn saludo